Atropellament a Rodalies a Mataró
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Atropellament a Rodalies a Mataró

Los atropellos en Cercanías, una tragedia difícil de evitar y que colapsa el servicio

Tres casos de suicidio en las vías del tren en menos de un mes en las Cercanías del Maresme hacen saltar las alarmas sobre esta grave problemática social que también afecta maquinistas y usuarios

Los usuarios de Cercanías y la ciudadanía en general ve con perplejidad y preocupación cómo se acumulan los casos de suicidios a la línea R1 del Maresme, con tres en menos de un mes (24 de febrero y 8 y 16 de marzo). No es un problema exclusivo de la comarca, puesto que según fuentes de la empresa, estos incidentes se producen por igual al conjunto de la red del país (el pasado miércoles, pocas horas después del atropello a Mataró que dejó una persona herida crítica, se produjo otro a Vic). En los últimos dos años se han producido de media unos sesenta atropellos a las líneas de Cercanías de Cataluña, más de un 80 % de los cuales por suicidios, consumados o que quedan en o intento.

Hay un atropello por semana a Cataluña, la mayoría por suicidis

Se trata de un problema muy grave a todos los niveles, en primer lugar, evidentemente, para las víctimas y sus familias, pero también para el servicio de trenes y sus usuarios, puesto que estas incidencias obligan a cortar el tráfico ferroviario durante varias horas y colapsan el sistema. Según explica a Capgros.com Antonio Carmona, portavoz de Cercanías en Cataluña, la cifra de suicidios a la red de cercanías no ha ido en aumento en los últimos años, y por lo tanto es una situación que sufren desde hace ya mucho tiempo.

La mayoría de personas que optan por tirarse al paso del tren para suicidarse lo hacen desde puntos de acceso "no autorizados" a las líneas ferroviarias, pero dónde a menudo es muy fácil entrar puesto que no están bastante protegidos. Este es el caso del intento de suicidio que se produjo miércoles en Mataró, a la altura de la calle Floridablanca, donde el muro que separa la vía de la avenida Maresme no tiene ni un metro de altura.

Un tren de rodalies al seu pas per Mataró, a on s'ha produït l'atropellament

Un tren de cercanías a su paso por Mataró, donde se produjo el atropello el pasado miércoles. El muro que separa de la carretera hace menos de un metro

"La protección de las infraestructuras es una cuestión que depende de ADIF, y aquí poca cosa más podemos decir", afirma Carmona, que insiste que Renfe es el operador del servicio y que no pueden "entrar a analizar un ámbito que no es de nuestra competencia". Pero es el servicio quien se ve directamente afectado por este fenómeno. "Es demasiado habitual", reconoce, y los problemas que se derivan son múltiples.

Un 80 % de los maquinistas atropellan al menos a una persona durante su carrera

"Es obvio que quién lo sufre más es la víctima y, en el caso de los suicidios consumados, su familia", afirma el portavoz de Cercanías. Pero hay otros colectivos afectados, entre ellos los maquinistas que atropellan a las personas suicidas. "Tenemos un protocolo establecido con apoyo psicológico para ellos", señala Carmona. Según un reportaje publicado por el diario El Mundo en 2016, un 80 % de los maquinistas de Renfe atropellan al menos a una persona a lo largo de su carrera profesional.

Tren al seu pas pel Masnou. Foto: R.Gallofré

Tren a su paso por el Masnou. Foto: R.Gallofré

Cada atropello mortal supone afectaciones de mínimo dos horas

Cada atropello, además, supone un problema muy importante para el tráfico de trenes. "En caso de muerte, tenemos como mínimo dos horas de afectaciones", señala Carmona, puesto que habitualmente la autoridad policial decreta el corte de circulación en los dos sentidos, y hay que esperar a la llegada y actuación de los forenses, entre otros pasos. Esto comporta que el servicio se vea alterado y que los usuarios lleguen tarde a su destino, algo que genera muchas quejas por parte de unos viajeros que ya sufren otros problemas derivados de la falta de fiabilidad de Cercanías.

Más allá que sea responsabilidad de ADIF la gestión de la infraestructura, parece imposible que el acceso a las vías se pueda cerrar completamente a lo largo de todo el recorrido, a pesar de que se puedan hacer actuaciones puntuales en los lugares no autorizados donde el acceso sea más fácil. La solución es difícil, puesto que tal y cómo dice Carmona, "se trata de un problema social muy grave", derivado de las problemáticas en el ámbito de la salud mental (que han crecido a raíz de la Covid) y que requieren de una solución global.

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