Esther Tenedor a su taller
Esther Tenedor a su taller

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Esther Tenedor pinta la primavera perdida en el Espai Capgròs

A la muestra de Tenedor, que se puede visitar hasta el 28 de abril, además de pintura también se podrán ver tres esculturas de bronce terminadas también en tiempo de confinamiento

Flores, natura, colores, alegría. Esther Tenedor y Solsona debuta en el Espai Capgròs gentileza de Clínica Dental Familiar Dra Nogueras con una exposición que no podría ser más adecuada coincidiendo con el estallido de la primavera. La de Caldes de Montbui acumula una trayectoria de más de 30 años en el mundo artístico en el cual la inspiración con la naturaleza ha sido una de sus constante definitorias. Esto fue así también el año pasado, el 2020, con el estallido de la pandemia y el confinamiento. La serie de natura que presenta ahora en Mataró es hija de aquellos tiempos de reclusión de entonces.

De jueves 1 a miércoles 28 de abril al Espai Capgròs. Precio: gratis

"Hace un año perdimos la primavera, no podíamos salir y notar toda la alegría que comporta y me salió de dentro de pintarla", explica Tenedor. La evocación de toda la vida, colores y estallidos que se perdían se combinaba con los ramos que una amiga florista iba trayendo a Tenedor. Muchos de ellos, como testigos florales del que pasaba fuera, son protagonistas de las obras que se exponen. A la muestra que se puede visitar hasta el 28 de abril no sólo hay pintura, la faceta de escultora de Tenedor también tiene cuota con tres esculturas de bronce terminadas también en tiempo de confinamiento: "son tres bustos que recogen el pensamiento, la calma, la serenidad que habíamos perdido cuando de repente se nos paró el mundo", explica el artista.

La exposición de Esther Tenedor pone el Espai Capgròs al extenso atlas propio del artista, que tiene obra expuesta al Vaticano, Japón, México o Wahington y que ha expuesto en Madrid, Alemania o Italia. El artista asegura que siempre intenta transmitir "buen rollo" con sus cuadros e invita los asistentes a su exposición a asociar la primavera que pinta "con los elementos que nos gustan, el bienestar, aquel olor de campo, el viento que toque toca, el sol a la cara". Invita que vea el resultado de la primavera perdida a salir de la muestra "con más ganas de disfrutar de esta, no es una exposición de añoranza porque aquello ya es pasado: ahora sí que tenemos primavera y tocan cosas alegres", concluye. Y de este propósito, la exposición que ya se puede visitar en Espai Capgròs.

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