Gordillo "no hizo nada ilegal", según su defensa en base a las cámaras del Apolo

El abogado Carles Monguilod, defensor del exdirector del ACN, Catalunya Ràdio y el 'Principal', el maresmenc Saül Gordillo, ha asegurado este jueves al juzgado que lo investiga por agresión sexual que las imágenes de las cámaras de seguridad de la discoteca Apolo de Barcelona dejan "claro" que su cliente no hizo nada ilegal con la periodista que lo denunció por tocamientos no consentidos. Gordillo habría admitido tocamientos, pero totalmente consentidos. La denunciante, por su parte, ha ratificado su versión inicial de los hechos, afirmando que ella no consintió los tocamientos que le hizo su jefe durante la fiesta posterior a la cena de Nadal de la empresa el 1 de diciembre.

La versión de la víctima "no se ajusta a la verdad" según el abogado de Gordillo

Al salir del juzgado, Monguilod ha dicho que la denunciante "sorprendentemente" ha ratificado su denuncia ante los Mossos, manteniendo una versión que, según él, "no se ajusta a la verdad, según las imágenes privilegiadas" que constan a la causa. "Ha ratificado unos hechos que no son verdad, las imágenes se ajustan al que pasó, pero la denunciante ha ido rectificando su versión", ha asegurado. En este sentido, Monguilod ha explicado que estas imágenes, de unos 10 minutos de duración, muestran la interacción de Gordillo y la denunciante con aparente normalidad durante y después de los hechos. Según él, la joven ha dicho que no recordaba mucho nada de los minutos posteriores a los hechos porque estaba en estado de choque.

El letrado ha explicado que, en su larga declaración, Gordillo ha explicado que el que se ve a las imágenes se ajusta a la realidad: "una escena lúdica, divertida, con adultos interactuando, una situación absolutamente ajena al Código Penal, sin ningún tocamiento sexual no consentido, sino que las imágenes demuestran que fue consentido".

Según Monguilod, la buena calidad de las imágenes es una "suerte", porque podría evitar un "gravísimo error judicial". El letrado también ha criticado la "tortura" sufrida por su cliente debido al "linchamiento mediático". Monguilod también ha criticado los tuits de la consejera de Igualdad y Feminismos, Tània Verge, y de la ministra de Igualdad, Irene Montero, que, según él, criminalizaron " conductas no delictivas y atacaron la presunción de inocencia".

Según la abogada de la víctima, las imágenes muestran que "no hubo consentimiento"

La abogada de la víctima, Noemí Martí, ha asegurado, en cambio, que las imágenes "avalan los hechos denunciados" y dejan claro que "no hubo consentimiento". Además, ha dicho que Gordillo ha dicho al juzgado que la culpa que él esté investigado es del Código Penal, porque sanciona hechos cómo los ocurridos a la sala Apolo. Por otro lado, ha lamentado que Gordillo "haya tenido la osadía de quererse presentar como víctima" de una supuesta confabulación contra él, sin concretar quién habría orquestado este complot. Según la defiende letrada de la mujer, Gordillo habría admitido al juzgado que los hechos denunciados no serían delito antes de la ley del 'solo sí es sí', y que ha admitido que hizo tocamientos a la supuesta víctima, pero habrían sido consentidos.

"He sufrido un juicio paralelo inaceptable en un estado de derecho" declaró Gordillo

Por su parte, Gordillo no ha querido responder las preguntas de la prensa pero sí que ha dicho que salía "aligerado y satisfecho" de su declaración. El periodista ha criticado que ha sufrido un "juicio paralelo durísimo e inaceptable en un estado de derecho", y que no se ha respetado su presunción de inocencia. En este sentido, ha lamentado algunos comentarios contra él después de los hechos por parte de personas "relevantes". Además, ha dicho que confía que con el tiempo la justicia le dará la razón porque las imágenes de las cámaras de seguridad son "contundentes y explícitas".

Gordillo ha declarado durando cerca de dos horas al juzgado que lo investiga y ha respondido a las preguntas de Monguilod, la fiscalía y el magistrado instructor, pero no de la acusación particular. Ninguno de las acusaciones ha pedido ninguna medida cautelar por él, que ha salido del juzgado en libertad con cargos. La acusación particular quiere citar a declarar varios testigos de los hechos, mientras que la defensa quiere alguna diligencia cómo una prueba pericial psicológica porque analice a través de las imágenes de vídeo si la chica parecía en estado de choque o de pánico y con amnesia los 10 minutos posteriores a los hechos. Posteriormente, la defensa quiere pedir el archivo del caso. La denunciante, mientras tanto, será revisada por psicólogos forenses.